Resumen:
En el umbral del siglo XXI, la creación de la Unión Económica y
Monetaria de Europa (UEM) representa uno de los proyectos económicos
más ambiciosos de las últimas décadas a escala mundial.
Desde la firma del Tratado de Roma en 1957; la Unión Monetaria
es probablemente el paso cualitativo más importante en el proceso
de integración de las economías europeas. La integración de los distintos
países en un área monetaria única, prevista en el Tratado de
Maastricht (1992), se refleja en diversos aspectos como la aparición
de una nueva moneda, el euro, que es única para los países integrantes
de la UEM y la creación del Banco Central Europeo (BCE),
que será el encargado de manejar variables financieras, monetarias
y cambiarias del área.
