Resumen:
Cuando una empresa se vuelve incapaz de superar sus dificultades y,
por ende, ya no puede cumplir con sus obligaciones, pueden utilizarse
algunos medios alternativos para que continúe en funcionamiento
empleando procedimientos relativamente formales o relativamente
informales. Cualquiera sea el método, en él se encontrará —como
principio subyacente— la conservación de la empresa como bien
jurídico protegido.